La lentitud de la burocracia

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Todo el mundo ha tenido que sufrir alguna vez en carne propia el que posiblemente sea el mayor problema que tiene una sociedad desarrollada. Se trata de la burocracia, o lo que es lo mismo, el largo tiempo que algunas veces demoran las cosas cuando hace falta algún papel que requieren los organismos para dar un paso adelante en algún asunto.

 Uno de los ejemplos más evidentes de esta lentitud se encuentra en la bolsa de empleos que ayuntamientos y comunidades suelen ofertar con el interés de eliminar de las listas del paro al menos a algunos de los demandantes. El problema comienza cuando se convoca a la gente para que se apunten en las listas antes de poder acceder a las pruebas de acceso, para lo que ya de por sí se necesita presentar algunos documentos que acrediten el situación laboral en la que se encuentra cada uno. Algunas de las las veces es necesario acudir a determinados sitios para que nos den los documentos, y el tiempo que tardan en darlo es tan lento que incluso se han dado casos de que cuando los documentos se han emitido el plazo de presentación había prescrito y por lo tanto no se ha podido acceder a la bolsa de empleos. ¿No se podrían agilizar los trámites?